Na ocasião, foi lançada a cartilha de Orientações para o Trabalho no
Exterior, elaborada pelo Ministério das Relações Exteriores, com o
objetivo de alertar profissionais, tais como modelos, jogadores de
futebol e outros, sobre os riscos da emigração, bem como alertar sobre
as formas de evitá-los.
"A
los inmigrantes, lo justo. De dientes para fuera, los españoles toleran
a los inmigrantes, pero cuando se trata de echarles la culpa del
fracaso de los negocios de barrio o de aceptar sus creencias religiosas,
la cosa no va tan bien. Así lo indicó una encuesta presentada ayer por
la Obra Social La Caixa sobre convivencia intercultural en el ámbito
local en territorios de alta diversidad.
Tan
solo un 24,8% de los españoles que viven en barrios de alta diversidad
asegura tener una convivencia genuina, contacto fluido, con los
inmigrantes. Un 52,8% dice coexistir con ellos con indiferencia, y un
16% considera que sus relaciones interculturales se producen en un clima
de recelo y tensión.
La
encuesta forma parte del Proyecto de Intervención Comunitario
Intercultural que desarrolla esta entidad en 25 territorios de España
marcados por su diversidad. Los resultados provienen de una muestra de
casi 9.000 personas y ha sido coordinado por el profesor Carlos Giménez,
catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid.
El
estudio reveló que el 95% de los españoles cree que los extranjeros
deben adaptarse a la sociedad receptora y el 46% de ellos no se muestra
partidario de que mantengan sus propias costumbres. Además, uno de cada
cuatro españoles se muestra abiertamente contrario a la inmigración,
especialmente a los musulmanes, considerando que empeoran la convivencia
y que no deben votar en las elecciones municipales.
Un
25,2% de la población autóctona tiene recelo de la religión musulmana.
Varían mucho las cifras, dependiendo del territorio encuestado, como en
el Clot barcelonés (82%) y en el barrio Universidad en Madrid (42%). De
parte de los inmigrantes, un 100% de los musulmanes del Clot, por
ejemplo, creen que existe mucho recelo a su religión en ese barrio. En
Jeréz Sur, en Cádiz, un 70% de la comunidad considera que los comercios
de extranjeros han hundido el comercio tradicional de barrio, a pesar de
que se trata de una comunidad con una baja concentración de
inmigrantes.
Entre
los perfiles de mayor hostilidad destacan los de zonas de «enorme»
concentración de inmigrantes, donde conviven extranjeros de baja
calificación y sin recursos con autóctonos mayores de 65 años, explicó
Giménez. Cataluña es la comunidad autónoma que lidera la lista de
municipios de mayor hostilidad hacia los inmigrantes, con tres de los
cinco barrios de mayor rechazo, aunque Giménez no quiso concretar los
nombres para evitar «la estigmatización». Los barrios y ciudades
catalanas que han participado en el estudio son Nou Barris, El Clot y El
Raval (Barcelona), Salt (Girona) y Tortosa (Tarragona).
Un problema que va a más
El
catedrático auguró que conforme la crisis siga su curso y los recortes
en partidas sociales aumenten, así lo hará también la actitud
desfavorable hacia los inmigrantes. El aumento de los conflictos
latentes, así como de problemas estructurales de desigualdad son algunos
de los resultados que esperan observar en la siguiente encuesta. "Nos
sorprendería que no fuera así", agregó.
Para
el especialista la clave para alcanzar una mayor convivencia está en no
«extranjerizar» constantemente a las personas. "Hay que trabajar en una
nueva pedagogía para no decir “el chino de la tienda", explicó.
Fuente: www.abc.es